El buen clima, las escapadas de último momento y la cercanía del verano impulsaron el turismo interno, aunque con estadías más breves y un consumo más moderado.
Durante el fin de semana largo por el Día del Respeto a la Diversidad Cultural, 1,44 millones de turistas recorrieron distintos destinos del país, según el relevamiento realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
La cifra representa un incremento del 2,1% respecto al mismo feriado de 2024, lo que confirma el interés sostenido de los argentinos por seguir viajando, pese al contexto económico.
Sin embargo, la tendencia marcó viajes más cortos y planificados a último momento.
La estadía promedio fue de dos noches, frente a las 2,4 del año anterior, lo que implicó una caída del 16,7% en el tiempo de permanencia.
Escapadas cercanas
Los viajeros optaron por escapadas cercanas, priorizando destinos de fácil acceso y con buena oferta gastronómica o de naturaleza.
El gasto promedio diario fue de $91.190 por persona, un 1,5% menor en términos reales frente a 2024.
El estudio de CAME destaca que, si bien se notó un comportamiento más austero, los turistas sostuvieron los consumos básicos en alojamiento, transporte y gastronomía, buscando equilibrar descanso y cuidado del bolsillo.
En total, el movimiento generó un impacto económico de $262.627 millones, un 16,2% menor en términos reales que los $228.479 millones del año pasado, debido principalmente a la reducción en la cantidad de noches.
El buen clima en gran parte del país, la amplia agenda de eventos culturales y deportivos, y la necesidad de descanso después de varias semanas sin fines de semana largos, fueron los principales motores del turismo interno.
Expectativas para el verano
De cara a la temporada de verano, el sector turístico se mantiene expectante: las escapadas cortas siguen marcando el pulso del movimiento, mientras la recuperación del gasto dependerá de la estabilidad económica y de los incentivos que ofrezcan los destinos locales.

