28 septiembre, 2025

Una vida entre escenarios y sueños: conocé la historia de una platense en Nueva York

Nacida en La Plata y con alma viajera, Martina Demaio dejó Argentina para estudiar teatro en Nueva York. Hoy dirige su propia compañía, da clases, crea obras originales y afirma que, aunque no es fácil, “vale la pena cada segundo» de su vida «nómada”.

Martina Demaio nació en La Plata, pero su historia personal y profesional parece escrita por el destino de una viajera. Con familia repartida entre España, Italia y Australia, el mapa fue desde siempre parte del lenguaje cotidiano. Hoy vive en Nueva York, donde dirige una compañía de teatro latino y trabaja como actriz, docente y creadora.

“Después de la pandemia, sentí que tenía que hacer algo distinto. Me subí a un avión con lo que tenía y dije: Nueva York o nada”.

“No sé si me considero solo platense, me considero del mundo”, dice entre risas en diálogo con EmbarcaDos por Fm La Redonda. Su vida en el exterior comenzó hace cuatro años, con una valija llena de ganas y muy poco presupuesto.

La ciudad que nunca duerme puede parecer hostil, pero Martina encontró su lugar entre ensayos, clases a niños y el proyecto que más la apasiona: una compañía que impulsa el teatro latino.

“Trabajamos con autores y directores latinos, hacemos funciones en bares, lo filmamos para que lo vea el mundo. Queremos que nuestras historias crucen fronteras”.

Como buena argentina por el mundo, no falta la nostalgia ni las videollamadas a su mamá desde la cocina neoyorquina. “Una vez por mes le digo: me voy con vos a viajar en autocaravana”, cuenta entre risas. Pero detrás de cada duda, aparece la pasión por el arte y el deseo de crecer.

A pesar del alto costo de vida en Nueva York, Martina afirma que hay oportunidades: “Si tenés voluntad y buena energía, todo llega. Acá se paga bien, y eso te permite vivir dignamente, aunque hay que trabajar mucho”. Y también piensa a futuro: “No sé si me voy a quedar acá para siempre. Capaz me voy a Londres o a España. Todo puede pasar”.

Para los que sueñan con vivir una experiencia parecida, Martina es clara: “Lo recomiendo con todo el corazón. No es fácil, pero es una vida que vale la pena. Viajar, crear y vivir de lo que amás es un privilegio enorme”. Y concluye con una certeza: “No hay como cruzarte a un argentino tomando mate en otra parte del mundo. Es como volver a casa por un rato”.

Escucha la nota completa

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *